Recientemente, el think tank Global Financial Integrity (GFI), realizó un informe de flujos financieros de comercio ilícito en el sector del comercio internacional, este estudio se realizó en 134 países en desarrollo, en un periodo de tiempo entre 2009 y 2018. Este estudio arrojó que México es el país latinoamericano con mayor nivel de fraude en facturación de comercio internacional.
La brecha que registró el estudio respecto a México entre las exportaciones declaradas y las importaciones registradas tiene un valor total de 47,400 millones de dólares, lo cual se traduce en el 15% del total del comercio internacional del país. México obtuvo el séptimo lugar a nivel mundial después de Tailandia, Malasia, Polonia, Rusia, India y China. También se tomaron en cuenta los 36 principales países con una economía avanzada, ranking en el cual México se ubica entre los tres primeros lugares con facturación fraudulenta del comercio internacional.
El think tank identifica la facturación fraudulenta como la principal causa de estas brechas, este problema se da cuando los exportadores e importadores declaran cifras distintas a lo que realmente se importa o exporta, este acto provoca año con año grandes pérdidas monetarias al comercio internacional. El informe de la GFI afirmó que, “Al sobrevalorar o subvalorar el valor declarado de las importaciones o exportaciones, los comerciantes mueven ilícitamente riqueza a través de las fronteras internacionales ocultándose dentro de los pagos regulares por comercio en el sistema de comercio internacional”
Para realizar el estudio, se hizo una comparación entre los datos registrados de importación y exportación, contra los que se reportaron ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Para los países en desarrollo, la facturación fraudulenta representa un problema mayor y más aún en el contexto actual, ya que el problema ha ido en aumento, por ejemplo, en 2018 la suma de la brecha registrada en el estudio de los 134 países, corresponde a 1.6 billones de dólares, una cifra muy elevada, por lo que es necesario crear políticas y estrategias para combatir esto.