El gobierno de Andrés Manuel López Obrador adquirió en su totalidad las acciones de Deer Park, con esta adquisición Pemex se verá atado al mercado exterior de petróleo, anteriormente el presidente de México se había comprometido a dejar de exportar petróleo e importar gasolina para el siguiente año. Cuando se realice la compra, el gobierno mexicano tendrá que tomar una difícil decisión sobre si seguir exportando petrolíferos a Estados Unidos o si el destino de estos será únicamente el mercado del país.
El periódico El Universal, obtuvo una copia de la evaluación y asesoría que hizo el banco Barclays sobre la compraventa del complejo, en el documento se expresa que “[…] de los 290.1 mil barriles diarios que procesará Deer Park en promedio durante los próximos diez años, el 43% será crudo mexicano tipo Maya”, las leyes estadounidenses hacen a un lado la idea de dejar de exportar crudo al extranjero, aun cuando la refinería sea de propiedad mexicana. PMI Shell confirmó que México importa más de la mitad del petróleo crudo amargo que produce la refinería.
A pesar de que la refinería pertenecerá a México, la gasolina y el Diesel que se produzca en el complejo y se trasladen a México, saldrán de Estados Unidos con pedimento de importación. Respecto a la adquisición del complejo, se han pronunciado un par de empresarios de Nueva York, presentando una demanda ante tribunales estadounidenses, buscando impedir que se realice la venta, ya que, según ellos, esto elevaría los precios de la gasolina en Estados Unidos.
La demanda se presentó la semana pasada y en ella se alega que la compraventa de Deer Park disminuiría la competencia en la gasolina, lo cual provocaría un aumento en los costos de los demandantes de energía. Incluso el abogado de ambos empresarios aseguró que Deer Park administra alrededor del 2.5 % de la gasolina que se vende en Estados Unidos y expresó “Este es un momento crítico ahora mismo en el mercado de la gasolina en Estados Unidos”.
