Si bien, el comienzo de la pandemia provocada por el Covid-19 causó un retraso en las cadenas de suministros a nivel mundial, con la progresiva recuperación y reapertura de los mercados, los países tendrían la necesidad de volver a cubrir las necesidades comerciales, lo cual daría inicio a la sobredemanda de mercancía que afectaría México en su capacidad de cubrir dichas necesidades debido a la escasez de contenedores de carga, la cual infiere principalmente su relación con su socio comercial más representativo, Estados Unidos (EE. UU.)
Por otra parte, la constante fricción entre las relaciones comerciales EE. UU. – China, han aumentado la demanda de insumos y mercancías mexicanas, sumado a la alta presencia de empresas estadounidenses que se encuentran en territorio mexicano, además de considerar la alta demanda de manufacturas y tequila por parte del país vecino. Sumado a ello, comienzan temporadas con un flujo económico alto como lo son regreso a clases, el Buen Fin y la temporada navideña, algo que podría verse afectado por el tiempo aumentado de suministro.
Aunque podemos rastrear la baja inversión en contenedores de carga y servicios de trasporte con la caída del comercio internacional en 2020 con el inició de la crisis sanitaria, periodo en el que la CEPAL nos dice “el volumen del comercio mundial de bienes cayó un 17,7% con respecto al mismo mes de 2019”, el rápido aumento de la demanda comercial hacia México ha causado tanto el aumento en las tarifas de transporte como la necesidad de vislumbrar mecanismos que faciliten la logística en cuando a carga y descarga de mercancías, como la necesidad de infraestructura que facilite la transición de las mismas.
En este caso, es necesario para México la implementación de estrategias que permitan y faciliten la entrada y movimiento de las mercancías, mejorar la eficiencia por parte de los medios de transporte de mercancías, así como una mayor inversión en infraestructura que facilite los procesos requeridos en las cadenas logísticas nacionales.
Si bien, México se encuentra en una situación delicada debido a la necesidad por cubrir la demanda por parte de Estados Unidos y Canadá, principalmente durante fechas clave, tras la implementación de estrategias y aumento en su inversión enfocada a transportes e infraestructura, podría aprovechar el impulso económico y estratégico que representa el incremento en la demanda de mercancía procedente del territorio.